Fatiga Crónica: ¿Qué pasa cuando se te acaban las pilas?

Todos nos cansamos. Es completamente normal. El cansancio es un indicativo del organismo para reposar y recuperar las energías. Usualmente el cansancio se presenta luego de una intensa actividad física o mental.
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Ahora, existe otro tipo de cansancio. Ese que no se va con el descanso, y que perdura a lo largo del tiempo. Este tipo de deficiencia energética se conoce como el síndrome de fatiga crónica, y es un trastorno que provoca fatiga extrema.
 
Esta fatiga no desaparece con el descanso, es un agotamiento agudo, puede afectar a cualquier persona en cualquier edad y puede durar más de seis meses consecutivos.
 
Las personas que sufren de este mal no pueden realizar sus actividades cotidianas de forma normal, ya que el estado de agotamiento en el que se encuentran no se los permite. El síndrome de fatiga crónica se presenta acompañado de una variedad de síntomas. Nosotros te decimos cuáles son.

¿Cómo se presenta la fatiga crónica?

La fatiga crónica se presenta con una serie de síntomas que, por separado, no parecieran ser muy graves, pero que si los juntas, podrían causarte muchos problemas. A continuación te decimos cuáles son para que puedas identificarlos y buscar ayuda médica inmediata:

• Sentirse mal por más de 24 horas después de haber realizado ejercicio
• Dolor muscular
• Problemas de memoria
• Dolores de cabeza
• Dolor en varias articulaciones
• Problemas para dormir
• Dolor de garganta
• Ganglios linfáticos inflamados

¿Qué tratamientos hay que seguir para combatirla?

La fatiga crónica no tiene causa conocida hasta la fecha, por lo que su diagnóstico es bastante difícil de realizar. Aunque el tratamiento apunta a reducir los síntomas del paciente, muchas enfermedades subyacentes pueden estar causándote fatiga sin que tú sepas que tienes dicha enfermedad.
 
Sin embargo, muchos médicos están de acuerdo en seguir un número de tratamientos recuperativos, como la terapia cognitivo-conductual, el ejercicio físico gradual y los tratamientos estándar para manejar los trastornos de sueño, la depresión y el dolor. La meditación y los ejercicios de relajación también han demostrado ser eficaces combatiendo el síndrome de fatiga crónica.
 
Una vez más, y fieles a nuestra costumbre, en Mi Enfermera te recomendamos que acudas regularmente a tu médico y que sigas todas sus indicaciones. Tu salud es muy importante, y necesitas ayuda para mantenerla en buen estado.
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Nota: Si sufres de fatiga crónica te recomendamos leer esta nota sobre el Magnesio