Consejos para la elección y el uso de andadores para ancianos

Quizás no todos, pero muchos ancianos llegan a una edad o estado en el que se les hace difícil caminar sin asistencia. En ese caso, los andadores les permiten moverse de forma más sencilla y reducir el riesgo de sufrir un accidente.

Pero habiendo diferentes tipos de andadores, es necesario elegir el que resulte más conveniente para cada uno. Los siguientes consejos pueden ayudarte a tomar una mejor decisión:

1) Busca el que mejor satisfaga tus necesidades: Hay diferentes tipos de andadores y dependiendo de qué tanta dependencia requieras de él para caminar, podrías elegir entre diferentes opciones:

-Andador sin ruedas: Es el modelo más simple y garantiza estabilidad. Es el más adecuado para un anciano que a pesar de su edad tiene aún fuerzas y sólo necesita un apoyo mínimo para moverse. Recordemos que con estos andadores la persona es la responsable del movimiento, tiene que levantar y bajar el andador para poder avanzar.

-Andador con dos o cuatro ruedas: Brindan mayor facilidad para avanzar, y facilitan el movimiento al permitirte poner tu peso en la máquina. Esta máquina es recomendable para las personas que necesitan apoyo para movilizarse pero que no carecen de estabilidad y no dependen tanto de apoyarse en el andador.

2) Busca comodidad y seguridad: La mayoría de andadores vienen con asideras de plástico, pero puedes buscar otras de un material más suave. Muchas veces, si es de metal puede generar sudor en las manos e incluso generar el riesgo de que la persona se resbale. También el tamaño de las asideras es importante, los ancianos deben poder agarrarlas bien.

3) Considera los accesorios: A veces no basta con adquirir el andador, pues otros accesorios se hacen necesarios para la mayor comodidad del anciano. Una bandeja, por ejemplo, resulta muy útil para poder transportar comida, bebidas y otros artículos de mesa. También otras adiciones como bolsas o canastas a un lado pueden servir para llevar cosas como libros u otros objetos.

Una vez elegido el andador que más le conviene, es importante cuidarlo y darle mantenimiento. Puede ser riesgoso si el andador no tiene todas sus piezas correctamente ajustadas. Por otro lado, en el caso de sentir alguna molestia o incomodidad con el aparato, siempre es recomendable consultar con un médico o fisioterapeuta.