5 Cualidades que identifican a una buena enfermera

La enfermería es una profesión muchas veces poco valorada. Sin embargo, todos a lo largo de nuestra vida hemos necesitado o necesitaremos de una enfermera. Son personas indispensables en el sistema de salud y realizan labores que hacen necesaria una verdadera vocación por el servicio. Se trata de una profesión más seria.

Una de las pioneras de la enfermería moderna, Florence Nightingale, elaboró conceptos sobre esta profesión y también sobre las cualidades que debía reunir la persona que la ejerciera, todo con el fin de brindar mayor bienestar al paciente. 
Para que una persona ejerza la enfermería es necesaria la consideración de ciertos valores: el respeto a la igualdad, el intelecto, la responsabilidad, la honestidad, el respeto a la dignidad humana, entre otros.

Una buena enfermera debe vivir esos valores y plasmarlos en acciones. Entonces, ¿qué cualidades reuniría una buena enfermera?

1) Compasiva: Se trata de un sentimiento de preocupación y simpatía por los pacientes y sus familiares. Las personas a las que atienden rara vez se encuentran en el hospital por su propia decisión, tienen miedo y están en constante riesgo de perder la salud o sus vidas. Esto implica que la enfermera debe apoyar al paciente en el proceso pero además manifestarse en el caso que el ambiente en el que se encuentre le parezca riesgoso para el enfermo.

2) Desinteresada: Una buena enfermera es capaz de dar todo sin pensar en sí misma. Los pacientes son los primero en su mente y deja de lado sus propios intereses personales para dar un mejor servicio. Dejar de lado el almuerzo o privarse de dormir es común cuando la prioridad es la atención al enfermo.

3) Empática: Al convivir con personas asustadas y enfermas, es necesario que la enfermera se relacione con los sentimientos de los pacientes que atiende y se identifique con ellos. Para ser una buena enfermera, es necesario dejar de lado su propio sentir y adentrarse en las preocupaciones del paciente y en los valores que este posee, a+un si van en contra de los de la enfermera.

4) Consiente de sí misma: Además del trato con los pacientes, una buena enfermera debe tener un entendimiento de sus fortalezas y debilidades, para así saber cómo darle un apoyo más completo al paciente. Al conocer sus deficiencias, sabrá en qué momentos recurrir a otros colegas por el bien de los enfermos.

5) Sed de conocimiento: La enfermería es una profesión que nunca termina de aprenderse. Una buena enfermera busca actualizarse constantemente y está pendiente de estar al tanto de los últimos procedimientos en su campo. Sólo así podrá ofrecerle lo mejor a aquellos que la necesitan.

Estas cualidades son confrontadas a diario en el entorno de trabajo de las enfermeras y ellas deben luchar por mantener su equilibrio y su accionar de acuerdo a sus principios, además de actuar en pro de una mejor atención para los pacientes, que son su prioridad.